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3 de abril de 2011

Sean felices o MUERAN en el intento



Eres el minuto en que sueño que te veo cuando me despierto. Eres el impulso, el proceso que me ayuda a levantar el cuerpo. Eres cada punto y seguido de mis textos. Y seguido, y a parte, y coma y exclamación. Eres el hielo de cada cubata, la espuma de cada cerveza, el limón de cada tequila. Eres vibración de mi móvil, cada ilumarse la pantalla, cada tecleo de mensajes. Eres cada noche en vela, cada pastilla para dormir, cada vuelta a la cabeza. Eres cada canción de Hombres G. Y aunque el siguiente paso lógico es decir que eres cada momento que me hace feliz, no lo daré. Por la sencilla razón de que eso sería subirte a un escalón más, ensalzarte más de lo que es cierto. Porque antes, y después de ti, hay vida. Aunque no es ni la mitad de lo que yo considero "vida", lo ES

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